
Gota a gota la muerte
se llevaba un pedazo de ti a cada paso
con la paciencia de quien sabe
que tiene la batalla ganada
Y tu mano en mi mano
el universo dio media vuelta
y nos cambió las sillas
Mientras tú te desvanecías con un miedo de niña
yo envejecía de golpe en ese instante
secuestrada por una vejez prematura
sin ninguna intención de pedir un rescate
Gota a gota la muerte
se precipitaba por tu cuerpo transparente
resonando en el desagüe que se tragaba tu vida
mientras buscábamos inútilmente un tapón
Y firmes mis ojos dieron descanso a los tuyos
que aunque no me creyeron,
se extinguieron exhaustos en mis pupilas
Gota a gota sonaba la muerte
Y mis ojos te cantaban para que no la oyeras
Nota a nota silenciando a la muerte
Y tu mano en mi mano dejó de moverse